martes, 29 de marzo de 2016

Prologo

Remo




Prologo:

Tengo muchas historias en la cabeza, admito ser alguien que fantasea en ratos libres, usualmente cuando viajo en un autobús me recargo en la ventana y sueño despierto, creo que ésta es la historia que más he desarrollado.
Esta historia la escribí para un cortometraje  en la preparatoria, vi que había tres categorías Animación, documental y una historia que podría ser dramática, de comedia o ciencia ficción, al principio tenía pensado grabar cerca de la escuela, mi personaje principal sería un compañero llamado Ricardo Abimael, a pesar de que la escribí tomando en cuenta los  recursos escasos que tengo jamás concreté nada. Los viajes en el tiempo siempre me han gustado, aunque la verdad mi inspiración fueron los videojuegos.  Jugaba en un emulador de Nintendo64 en mi computadora,  donde podía salvar el progreso en el momento que quería con F5,  sí era un nivel difícil  recargaba con F7, de esé modo pude ganarle a Dark Link la primera vez. Además, tengo que admitir una influencia de Mirai nikki una serie de anime que me recomendó mi amigo Rogelio de la Torre. Donde se me ocurrió la idea de algún artefacto.
Yo personalmente soy muy fan de mi propia historia aunque suene autocomplaciente, aun veo errores y los corrijo, ya había hecho un borrador donde no termine la historia, después de no hacer el cortometraje lo deje de lado, al iniciar el 2016 me dije que llenaría una libreta de algo que yo haya escrito y recordé mi historia que  sé de memoria y la escribí hasta darle final. Inspirado por mi amigo G. Hernández que escribió una historia muy buena que todavía me tiene interesado.  www.ReporteHernandes.blogspt.com
Ahora cree este blog para exponerlo, espero que usted respetable lector (Estoy seguro que te pase el link personalmente) sea de su agrado.

Indice

Capítulo 1: El cobarde

Capítulo 1: El cobarde



Hace tres semanas, Jon y Frank regresaban de la escuela. Frank hablaba como siempre mientras Jon escuchaba, Jon era un chico introvertido que nunca quería meterse en problemas, a sus dieciséis años había conocido en pocas ocasiones los conflictos, ya que en el momento que los tenia de frente el salía corriendo,  adoptó este mecanismo de defensa desde pequeño y lo utilizaba instintivamente. Llegó a salir corriendo de exámenes que no estudió, cuando rompió accidentalmente un frasco de mermelada en una tienda e incluso cuando una niña le beso la mejilla, para él es simple, si te alejas del lugar eso dejara de existir y no hay porque temer, Fue entonces a las 2:05 p.m. cuando escuchaba a su raro amigo Frank, caminaban por las calles de una colonia de clase media baja, donde se toparon con unos  desagradables sujetos, los típicos chicos mayores que buscan sentirse superiores aprovechándose de su ventaja física agrediendo a los menores.

Frank hablaba y Jon escuchaba.
-Y volví a soldarlo, pero se quemó la punta del cautín –hablaba Frank, de forma inexpresiva. A pesar que  Jon no entendía lo que decía Frank, no le importaba  debido a que nunca lo confrontaba con preguntas. Al pasar frente al grupo de cinco chicos un par años mayores que ellos Jon agachó la cabeza, en ocasiones eso lo hacía sentir invisible.
- Entonces -prosiguió Frank -calentaba la punta del cautín al mismo tiempo que los cables- una voz proveniente del grupo de jóvenes lo interrumpió diciendo –Yo calenté a tu madre con la punta de mi p#$& -seguido por risas y burlas de los otros, Frank metió la mano al bolsillo, con la intención de sacar su navaja suiza y dijo –No hables de mi madre, no la conoces, en cambio yo si conozco a la tuya, No te avergüenza que llamen a tus padres a la escuela por tu comportamiento, yo sentiría vergüenza sí mi madres es una gorda en silla de ruedas, ¿le cortaron el pie por el diabetes?- Frank no se medía al hablar, la expresión del grupo de chicos cambió, estaba dado por hecho que le tenían que dar una paliza, a pesar de esto Frank seguía enojado y mostrándose agresivo, aunque  nunca sentía nada, la ira le hacía votar las venas.
Los cinco se acercaron, Frank saco la navaja que tenía el desarmador expuesto, al instante uno de ellos le pateó la mano, haciendo soltar su arma. – ¡¿Tu padre el alcohólico te enseño a patear así?! -gritó Frank, no pudo decir nada después  de un puñetazo en la boca. Jon se había paralizado de miedo, miro hacia abajo y vio la navaja suiza, en ese momento pensó en levantarla y ayudar a su amigo, pero salió corriendo con esa idea en la mente.


Todos en un momento de la vida tenemos que  tomar  decisiones, para resolver un problema. Tarde o temprano por más que corras te toparas con el problema, chocaras contra un muro y correrás al otro lado, entonces veras que estas encerrado en la obscuridad.
9:30 a.m. Jon caminada solo a la escuela, la calle estaba vacía. Dos cuadras al frente tres a la derecha para llegar a sus clases que comenzaban a las 10:00 a.m. Ya Habían hecho las paces con Frank por dejarlo solo, el pobre acabo con la nariz rota, raspones en los brazos y un ojo morado, aun así seguía tan inexpresivo como siempre, hablando de como construyo una radio. El cobarde de Jon apenas lo veía a los ojos, Frank sabía que si lo confrontaba saldría huyendo, por eso no le reclamó.

A una cuadra de frente y dos al girar a la derecha, llegaría a su destino en siete minutos, de pronto un sujeto apareció dando vuelta violentamente , llevaba una chamarra con gorro que le quedaba muy  holgada, el gorro era tan grande que le cubría hasta la nariz, Jon saco su celular para evitar el contacto visual, revisó  la hora y percibió como el digito de 0 cambiaba a 1, haciendo  exactamente 9:31 a.m., pudo escuchar  los paso del sujeto de la sudadera negra, eran golpes fofos  como si  corriera con calcetines, colocó su dedo en el botón de bloqueo. Pasaría al lado del tipo justo a la mitad de la cuadra, todo parecía normal, entonces el sujeto lo tomo del hombro y lo golpeo en el abdomen sofocándolo movimiento seguido por un empujón que lo puso espaldas a la pared.

Capítulo 2: El Maltratado

Capítulo 2: El Maltratado


El miedo se apodero de él, quiso huir pero estaba atrapado, esta ocasión no pudo salir corriendo y era demasiado cobarde para actuar. Se quedó paralizado con un sofocante dolor en el abdomen y una fría sensación causada por el miedo. Jon sintió que el tipo metió la mano dentro de su bolsillo –En cuanto se de cuenta que no tengo dinero me dejara ir – pensó para tranquilizarse, mientras, sus pies se preparaban para salir corriendo, la adrenalina le hacía temblar, al mismo tiempo que su corazón se aceleraba. Todo pasó en dos segundos pero lo sintió como una eternidad, entonces el delincuente aquel salió corriendo, Jon solo se quedó quieto, por primera vez el peligro se alejaba de él, y no él del peligro. -Los asaltos son muy comunes en las ciudades, además la siguiente calle es más transitada - se decía así mismo para sentirse más tranquilo.

Avanzo y dio vuelta a la derecha, ya al fondo podía ver su escuela, estaba a unos metros de la entrada, como protocolo para entrar tenía que mostrar al guardia su identificación. Mientras se aproximaba escucho una voz –Ayer tuve que abrir una vieja licuadora para sacar algo de cobre- Frank siempre llegaba hablando de sus asuntos sin decir hola, actividad a la que Jon ya estaba acostumbrado, pero, esta ocasión lo interrumpió, debido a que estaba agitado por su reciente evento –A mí me intentaron sacar la plata- interrumpiendo el tema de Frank -¿De qué hablas?- pregunto Frank de manera seca de emociones. –Un tipo me sometió contra la pared para hurgarme en las bolsas, pero no se llevó nada a pesar que tenía mi celular en la mano, luego salió corriendo- decía mientras metía su mano al bolsillo para sacar su identificación escolar, entonces se dio cuenta como presiono un botón. – tranquilo seguro soló era un pervertido que quería toquetearte las nalgas pero se decepcionó al instante – dijo en respuesta Frank. 
-  Su credencial de estudiante – exigió el guardia, Jon saco de su bolsillo un artefacto de dos botones, ya que era lo único en sus bolsillos. –Joven muéstreme su credencial- dijo el guardia de manera más agresiva. –Tranquilo Termineitor – dijo Frank frunciendo el ceño, en cambio Jon estaba más concentrado en el artefacto de dos botones, uno azul y uno rojo. -¿quieres que te vuelva a poner el ojo morado chíco?- dijo el guardia a Frank, en ese momento Jon presiono el botón rojo.
 – tranquilo seguro soló era un pervertido que quería toquetearte las nalgas pero se decepcionó al instante – dijo en respuesta Frank.
-  Su credencial de estudiante – exigió el guardia, Jon sintió un nítido déja vo y tenía la mano en la bolsa. –Joven muéstreme su credencial- dijo el guardia de manera más agresiva. –Tranquilo. – y al mismo tiempo que Frank. –Termineitor.- dijo Jon completando la frase. –No estoy jugando niño – exclamo el guardia al tiempo que inflaba el pecho. –Muestrale tu identificación, nos dejara en paz cuando vea que tu apellido no es Connor- Agrego Frank, Jon estaba a punto de volver a presionar el botón rojo cuando escuchó una voz. – ¡Jon! Aquí está tu credencial- dijo una voz femenina que se aproximaba a la entrada desde adentro.



Capítulo 3: El Tarado

Capítulo 3: El Tarado

Merry y Jon compartían salón en la primaria, a los ocho años Merry le pidió a Jon verse en el recreo junto a las canchas que nadie usaba, Jon acepto pensando en que compartiría con él los chocolates que ella siempre llevaba todos los recreos, ella llegó con las manos en la espalda –Cierra los ojos – dijo la niña. Jon obedeció y  extendió la mano esperando el dulce, en lugar de eso sintió algo cálido y húmedo junto a su rostro, abrió los ojos y se percató de la respiración de Merry. Ya habían pasado años de eso.
-toma tu credencial. - dijo Merry. – ¡Ñus locos! -exclamo Jon, el guardia lo dejo pasar, Merry lo tomo del brazo y lo llevo lejos del guardia y de Frank. –Entonces ¿De que querías hablar con migo? –Preguntó Merry -Yo quiero... ¿Hablar? - balbuceo Jon. –Querías que nos viéramos aquí, lo dijiste hace un momento.- Jon aún tenía el artefacto en la mano. –Mira esto- dijo Jon.  -¿Qué quieres que vea exactamente?-  dijo Merry cuando Jon presiono el botón azul. –No lo sé, creo que puedes ver el futuro con esto.- respondió el joven. -¿En serio? ¿Y cómo funciona?- dijo incrédulamente Marry. –Ni idea, solo hay dos botones con símbolos raros, funcionó con el rojo pero el azul no.- después de decir esto presiono el botón rojo. -¿Qué quieres que vea exactamente?-  dijo Merry cuando Jon tenía la misma posición de cuando presiono el botón azul. -¡¿Qué está pasando?!- exclamo Jon. –Tu dime- respondió Merry, Jon presiono el botón rojo. -¿Qué quieres que vea exactamente?-  Dijo Merry, entonces Jon le puso el control en la mano. –Presiona el botón azul- ella lo presionó, entonces Jon dijo –Ahora presiona el botón rojo-.
Ella tenía una expresión de molestia. –Ya lo presioné una y otra vez- ¿Cuál es el punto?- exclamo y le regreso el aparato. Jon solo la miro mientras se alejaba  y sintió muy mal que lo dejara solo.

En aquella ocasione él abrió los ojos y vio a Merry  dándole un beso, él salió corriendo asustado. Ahora pudo sentir la misma sensación que sintió la niña al quedarse sola viendo al otro irse. Jon tenía ganas de ir hacia ella pero aún se sentía inseguro. Parece que todo estaba patas arriba, solo le faltaba ver un frasco de mermelada huir, mientras él se rompiera a pedazos. 
Frank se acercó a él.   -Acompáñame al taller, necesito conseguir pilas doble D. - dijo Frank, Faltaban veinte minutos para la clase de computó, la cual duraba dos horas y seguía la clase de inglés de una hora. Ya en el taller de electrónica, donde Frank le encantaba pasar el tiempo, Jon pensaba la manera de contarle a Frank lo que le estaba pasando. –el sujeto que me ataco en la calle debió robarme la identificación ¿pero cómo la tenía marry?, ¿Por qué me dio el aparato?, ¿Por qué se repiten las cosas cuando lo uso?- pensaba Jon analizando la situación.

Capítulo 4: El inteligente

Capítulo 4: EL INTELIGENTE

-Sí pudieres regresar a un momento atrás ¿Qué arias? –Pregunto Jon. –Le meto una varilla por el c&$0 a las madres de todos hijos de la $”%&” cuando estuviesen embarazadas.- respondió Frank frunciendo el ceño, hubo un silencio incómodo para Jon. –Yo aria trampa en un examen, aunque tal vez tenga que hacerla más de una vez.- dijo Jon para romper la tensión. -Hoy estas muy parlanchín.- observo Frank mientras ajustaba una antena, en lo que parecía una televisión pequeña.
-¿Qué tienes ahí?- pregunto Jon. –Te lo diré sí te quedas a ayudar.- respondió Frank, Jon revisó la hora y se dio cuenta que su clase empezaba en minutos. –Tenemos que ir al laboratorio de Cómputo. – dijo Jon. –Hoy no iré, tengo que terminar algo, búscame a las once cincuenta cerca de los baños, quiero enseñarte algo- Jon siempre se sorprendía de lo que Frank era capaz de hacer, aún conservaba un reloj despertador  que arrojaba un chorro de agua, a pesar que tenías que cargarlo cada vez que se accionaba y se trababa en ocasiones, estaba muy bien hecho para alguien de su edad. –Iré cuando pueda- dijo Jon y se fue a su clase.
Durante las dos horas tenía que crear una interfaz, este trabajo era en compañeros de dos integrantes, pero como Frank no estaba,  Jon solo programo una parte. Entonces comenzó a navegar  en la web, escribió “viajar al pasado”. Investigo un largo rato.

-Es demasiado complejo como para un control de dos botones.- Pensó Jon se sentía profundamente intrigado y entonces creaba modelos mentales. -De hecho está bien, el botón azul salva el progreso y el rojo me lleva a este, escomo un checkpoint en un videojuego- Lo último que investigó fueron avances científicos recientes, pero no encontrar nada más que teorías. Aun es imposible para el humano hacer experimentos de este tipo. Así que no encontró nada más que películas he historias ficticias en blogs.

11:55 a.m. Jon entró a su salón, después de no ver a Frank ahí, decidió dejar su mochila en la butaca, en la paleta había una carpeta amarilla con el símbolo del aparato, la abrió y al leer lo que contenía se estremeció. 


Al abrir la carpeta Jon encontró dos hojas, la primera era un instructivo del aparato
La persona que está detrás de esto sabe más de mí de lo que imaginaba, no solo sabe cuál es mi salón, también la butaca en la que me siento. Definitivamente quiere que sepa cómo funciona su invento, suponiendo que él lo inventó. –se decía así mismo en su mente. – Ya deduje por mí mismo como funcionaba el botón rojo y el azul, realmente no pensé en combinarlos al mismo tiempo, pero… “Antes del primer contacto” ¿Con que? –Paso a la siguiente página, que era un recorte de periódico, el papel ya estaba gastado, pareciese que se llegaría romper al contacto. -“Mueren treintaiocho menores… Escuela del  centro… Doce de la tarde…  presunto acto terrorista…”.- Leía Jon intentando imaginar la escena, cuando leyó la fecha se dio cuenta que este diario fue publicado dentro de tres días, su mente se aturdió al instante. –Un terrorista matará a personas inocentes,  sí esto viene del futuro, quiere que evite esas muertes, pero… Yo no puedo hacerlo, soy un cobarde, soy incapaz de hacer algo. – Se reclamaba así mismo, sintió un vértigo que lo obligó a sentarse, el sentimiento de impotencia lo asustaba, golpeó su frente contra la paleta de la butaca tres veces. – ¿A dónde a á voy correr ahora? ¿Qué se supone que debo hacer? – se cuestionaba, se quedó boca abajo sosteniéndose con la frente en la butaca, sintió como una lagrima trazaba su camino por su cara. -Y sí…  el tipo que me ataco es el terrorista, está jugando con migo y quiere que lo detenga, después de todo me conoce lo suficiente… sabía que estaría asustado.- con su mano seco la lagrima que estaba a punto de caer a la primera hoja, su vista enfocó la tercera línea del instructivo, recargo su espalda en el respaldo, saco su celular para conocer  la hora actual. 11:58 a.m. -Necesito más tiempo para pensar. –Jon tomo el control y presionó Ambos botones.

sábado, 19 de marzo de 2016

Capítulo 5: EL ILUSTRADO

Capítulo 5: EL ILUSTRADO



Fue como entrar en un tornado, podía sentir todo su cuerpo girando con una  fuerte presión hacia adentro como siendo aplastado por todas direcciones y luego un vacío. Abrió los ojos y estaba en la calle, sentado en la butaca, justo donde lo atacó aquel sujeto. – ¿qué hora es? – Al ver su celular vio que eran las 12:00 a.m.
-Deberían ser las 09:26 a.m. cinco minutos antes de toparme con él…  eso es lo que debe estar tachado, él es la clave, es mi misión descubrir el nombre tachado, Como sea, lo que tengo que hacer ahora es ir a la escuela. – se levantó y camino con prisa hacia la escuela muy decidido, sin percatarse que estaba  dejando la carpeta a la mitad de la acera. –Estoy compitiendo con un despiadado capaz de acecinar ¿Qué intenta demostrar? ¿Quiere ser detenido? ¿Será acaso algún policía del tiempo? ¡Ñus locos! ¿Qué estoy diciendo?- vio que en la entrada estaba el guardia de la mañana, por lo que dedujo que aún eran antes de las doce de la tarde, pasó al guardia, y se dirigió hacia el edificio de administración escolar, para advertir a alguien más competente. –No puedo hablar sin pruebas de lo que digo, apenas yo me creo lo que está pasando.- pensó en la puerta del edificio, debo buscar la carpeta, saco su celular para ver la hora, vio las 12:07 p.m. – esto no ayuda. – pensó, en ese instante Marry salía del edificio. –Hola Jon. – dijo la linda chica sonriendo, y moviendo su cabello. –Hola Merry, ¿podrías darme la hora? Por favor. – dijo Jon con la mirada en el celular, pensando en una solución. –¡sipi! nueve treintaitres- dijo viendo su reloj pulsera, Jon se sentía estresado.- Disculpa tengo que…- En ese momento pensó en alejarse, pero, recordó ese sentimiento de quedarse viendo al otro alejarse. –Tengo que hablar contigo en la entrada, si, toma ahí estaré.- dijo entregándole su credencial de estudiante. –Está bien solo devolveré un libro a la biblioteca. –Dijo Merry, Entonces la vio dirigirse al edificio de enfrente. –Eso explica porque tenía mi credencial, suponiendo que hay otro yo, entonces hay otra carpeta.- Pensaba Jon, se dirigió a su salón donde encontraría la carpeta.
Entró a su salón y se paró frente a su lugar. –No hay carpeta, pero si está la butaca, hay dos butacas pero no dos carpetas, tal vez no haya otro yo, Merry estará esperándome, la llamare.- Expresaba Jon, al buscar en sus contactos vio el número de la escuela. –Eso es, una llamada anónima.- dijo, llamó a la administración con la intención de advertir de la explosión. –Instituto de bachillerato No. 3713. -  respondió una voz de una mujer madura al teléfono.- Tiene que evacuar, hay una bomba.- Advirtió Jon, cambio su voz. – ¡En tus nalgas!- respondió la mujer enojada, y luego le colgó. – ¿Qué fue eso? no puedo creerlo. Bueno, ahora lo que necesito es un sospechoso, alguien que me conoce… aunque no tiene que ser mi amigo para saber dónde me siento, es alguien que no dudaría al lastimar a los demás sin sentir remordimiento  alguno, tal vez uno de los bullys, pero eso no explica al terrorista, a menos que sea alguien que quiere que los detenga.- Jon pensaba en más personas que conociera, luego pensó en Frank, él siempre está creando cosas, tal vez fue él quien inventó esto en el futuro, él puede ayudarme 09:51 p.m. debe de estar en el taller, daré la vuelta por atrás de la cafetería, para evitar el laboratorio de cómputo donde tal vez me encuentre yo, al dirigirse por la parte de los baños, dispuesto a develar el misterio. Entonces lo vio.

El sujeto que lo había sometido en la calle, esa chamarra enorme no podía ser otra, alcanzó a verlo entrar en el baño de hombres, Jon tenía que tomar una decisión, salir corriendo con Frank o confrontar al tipo, que tal vez tenía una prenda parecida, tenía tanto miedo de cometer un error, que sus piernas lo disponían a correr de ahí, estaba de frente al muro y no podía retroceder, ¿o tal vez si?

8 – Talleres Carpintería, electrónica, pintura y música.
9 – Dirección principal, salón de maestros y lugar de papeleos.
10 – laboratorios: química, física, cómputo y biología.
11 – Administración: papeleo de becas, cambios de horarios, prefectura y primer ingreso.


viernes, 18 de marzo de 2016

Capítulo 6: EL OSADO

Capítulo 6: EL OSADO


Jon tomó el aparato y presionó el azul. –Investigare al sujeto, sí ocurre algún problema regresare aquí. – En ese momento dejó de sentirse como una presa, para convertirse en el cazador, entró a los baños y vio al tipo al fondo, donde esta los mijitorios. Tenía que ser inteligente al planear su estrategia para evitar contingencias al evidenciarlo, así que se quedó parado en la entrada. –Hace falta tener frio para llevar puesta esa sudadera.- Observo al aire Jon con propósito  de mostrar que estaba presente, hacerle saber que él no saldría corriendo y  evidenciar el hecho que lo hace sospechoso. -Hace falta tener pene y bolas para entrar a este baño y mírate, estás adentro.- Jon se dio cuenta que no tenía respuesta para eso, o el sujeto era muy ágil de mente o ya tenía una respuesta preparada.
El tipo dio vuelta, era apenas dos centímetros más pequeño que Jon, pero un año mayor, ese sujeto ya lo había visto en el grupo de los bullys. –Pero si es Forest Guum,- rio el tipo, Jon no le hiso caso y observó una irregularidad, definitivamente llevaba algo oculto bajo la ropa. –Así que pasaste al guardia sin problema, Yo diría que el paquete es muy obvio. – Señaló Jon al bulto en el abdomen, el tipo se dirigió al lavamanos. –Y eso que la traigo dormida.- respondió el chico. –Déjate de mamadas.- respondió Jon, irritado. -¿Qué mierda wey? – expresó el sujeto. –Lo que llevas ahí, va a dañar a mucha gente.- dijo Jon levantando la voz. –Si, creo que no fui a esá clase, pero eso lo saben todos.- respondió con una sonrisa tenebrosa, Jon estaba seguro que ahí se encontraba la bomba, no se quería arriesgar a que la detonara, así que presionó el botón azul, preparó su siguiente movimiento.
-No te lo permitiré.- Grito Jon, levantó su puño y tomó una postura amenazante, mirando al tipo a los ojos. – ¿Qué te fumaste? –Preguntó riendo el sospechoso. Nunca había estado tan decidido  en toda su vida, entonces alguien dio un golpe a la puerta abriéndola, esto causó que Jon callera al piso, proyectado por la misma puerta que protegía y el control salió volando, y el tipo de la sudadera levantó el control. –Caí en su trampa, esto fue demasiado, debí salir corriendo.- pensaba Jon al estar en el suelo escuchando risas, el tipo de la sudadera observaba el control presionó el botón rojo. -¿Qué es todo esto?- dijo al presionar el botón, mirando a todos lados, Jon golpeó al piso por la desesperación, se levantó y salió corriendo a dirección del sujeto con la intención de derribarlo, -Patéalo en la mano tiene una navaja- dijo el de la sudadera con el control en la mano, mirando hacia el vacío, Jon lo tiro al piso haciendo que el otro soltara el control. Se pudo escuchar la cabeza chocar en el piso, los otros chicos se dirigieron a Jon y este se abalanzó hacia el control para presionar el Rojo.

Entonces estaba de nuevo en la entrada, su corazón latía fuerte, entro a un cubículo. Luego de un rato se escuchó el golpe a la puerta. –Ya llegó papá.- dijo el tipo que entraba, junto a otro. Ahora la salida estaba bloqueada. –Alebrije, saca uno para mí- dijo el tipo más robusto, Jon ponía atención, para preparar su siguiente plan, presionó el azul, mientras espiaba como “Alebrije” se acercaba al sujeto que pateo la puerta, sacó una cajetilla de cigarros y una caja de cerillos, le dio un cigarro al otro y encendió un fosforo, para encenderle el cigarro haciendo una cueva con sus manos, para evitar que se apagara. –Ya lo tengo.- pensó Jon.
Esperó que alebrije tuviera las manos ocupadas, entonces salió sigilosamente y metió las manos en la chamarra. –Y a ti ¿Quién te invito una? – Dijo alebrije, Jon vio que lo que tenía era un sixpack de cerveza. –Hay que cooperar para chupar Bro.- Señaló alebrije, mientras Jon se  sentía estúpido. – ¿Es todo lo que trajiste?- Dijo el que parecía ser el jefe mientras exhalaba humo, Jon presionó el rojo.
–Alebrije, saca uno para mí- dijo el jefe, alebrije procedió, después dio una bocanada. –Dime que trajiste hoy Ale.- pregunto el jefe. –Dos six de cerveza y algo de mota.- respondió el subordinado. –Ya, llévatelo a la madriguera y al rato vamos.- dijo el jefe. Jon se sentó en el inodoro. –Así que era eso, solo una cerveza, la madriguera debe ser su escondite… pero, ¿qué fue lo que paso cuando tocó el control?
10:03 a.m.





Capítulo 7: EL Vengador

Capítulo 7: EL Vengador


El jefe se detuvo frente al espejo, para acomodar su peinado, mientras Alejandro alias “Alebrije” alias “Ale” salía de los baños. –Entonces no son ellos quien causaron la explosión. – pensaba Jon. –Definitivamente debo ir con Frank.- dijo y salió del cubículo con la vista puesta en la puerta, el tipo que aun acompañaba al jefe tomo del brazo a Jon por la fuerza. –Mira lo que encontré “Perro”. Exclamo el tipo. –Parece que una caca quiere escapar. – Jon se zafó y lo empujó encarándolo de frente, mientras que el otro reía. –Vamos a jugar al buzo. –Dijo el jefe alias “Perro”, con intención de meterle la cabeza la retrete, a pesar que Jon no podía con ellos, guardó el control dispuesto a enfrentárseles, daría un golpe en cualquier momento, ambos se aproximaron a él, Jon se abalanzó y dirigió su golpe al “perro”  vio como la mirada del perro apuntaba hacia la puerta, lo que ayudó que su golpe acertara, un segundo después vio a su lado un puñetazo dirigido al otro tipo, alguna otra persona que acababa de entrar lo ayudó.

-Ale, puto traedor. –grito el Perro, Jon vio al tipo con la sudadera negra a su lado, entonces el Perro con el labio roto, tomo a Jon de los pies y lo jaló haciéndolo caer, el tipo de la sudadera lo pateó en el pecho, haciendo que Jon perdiera sus tenis. –Vete, déjalo que se encargue. – Escuchó Jon dentro de su cabeza. –Confía en mí.- Agrego la voz grave,  Jon se levantó y salió del baño, sin mirar atrás.
Camino hacia la parta trasera del a cocina, vio a alebrije salir de una choza, donde el conserje guardaba cosas de jardinería, Ale ya no tenía la sudadera negra, además iba muy tranquilo mascando chicle. –No fue ale quien me ayudó.-Pensaba Jon intentando deducir que pasaba, Entró a la madriguera, solo encontró palas, tijeras y demás herramientas, ahí adentro olía demasiado a tabaco y algo de licor, salió de la choza, vio un acceso al sistema de desagüe, levanto la tapa y bajó por unas tablas puestas en forma de escalones, ahí abajo encontró una cajas llenas de revistas pornográficas y cigarrillos, una caja tenía la sudadera y las cervezas. –Creo que tiene sentido. – pensó, al salir vio algunas colillas tiradas, además de unos tanques de gas L.P. tras un alambrado, el olor del gas estaba muy fuerte. –Este es el peor lugar para fumar, de seguro usan la choza. –Pensabá, Jon llevaba la sudadera en la mano, -Ya sé que debo hacer, además de avisarle al conserje.- Dijo, Jon se puso la sudadera.

-Esta mierda es más pesada, de lo que esperaba.- dijo una voz atrás de Jon, este dio la vuelta y era Frank. ¿Vas a vestir el negro Snow?. –No sabes el día que he tenido.- exclamo Jon. –Pensé que tú eras el que no sabe nada, dijiste que estarías en la clase de cómputo- señalo Frank. –Bueno, tal vez si estoy ahí mi señor  Tyron Lannister.- sonrió Jon. –Hablas demasiado, me comienzas a irritar – dijo Frank, que llevaba su caja de herramientas. –Perdona.- exclamo Jon. -Al menos yo no moriré en la quinta temporada.- expreso Frank, se dirigió a la alcantarilla. –Espoiler, gracias.- respondió Jon sarcásticamente. –Cuando quieras. – dijo Frank mientras acomodaba la tv pequeña junto a unos paquetes con cables.
-Así que fuiste tú, Matarlos no ayudará.- exclamo Jon.- Nadie morirá, solo incinerare esta mierda, tengo derecho a vengarme.- respondió muy tranquilo Frank, Jon se acercó a él. -Hay una fuga de gas, hay que reportar eso antes. –Tranquilo, esto explotará hasta las doce, siempre se vienen a la choza a esa hora, cuando se escuche la explosión, nuestro robocop estará en la cafetería y vendrá a ver qué pasó, y verá a estos tipos.- Contestó Frank. –Es un plan muy desarrollado, entonces no hay porque preocuparnos. – Señaló Jon. –Acompáñame al taller te enseñare un robot nuevo.- Dijo Frank, Jon vio hacia los baños. –Tengo cosas que hacer antes.- respondió frank. -¿A dónde vas?- pregunto Frank. –Atrás de ti- respondió el chico, y cuando Frank volteo a atrás Jon presionó ambos botones.






jueves, 10 de marzo de 2016

Capítulo 8: EL Valiente

Capítulo 8: EL Valiente


-09:21 a.m. Bien ya estoy listo, en cinco minutos apareceré aquí en la butaca, entonces me esconderé en la esquina.- Dijo Jon en voz alta para establecer su plan. –No puedo creer que sea yo.- escucho Jon una voz en su cabeza.
-Creo que me estoy volviendo loco.-Pensó Jon.
-¿No te has preguntado de donde salió el remo?- Pregunto esa voz proveniente de la nada.
-¿Remo?- respondió Jon, que al hablar al vacío pensaba que perdía la cabeza, se agachó en la esquina y bajó la cabeza.
-Eso nunca te hará invisible.- Comento la voz.
-¿Eres quien creo que eres?-pregunto Jon.- Soy una de las mentes más brillantes de mi tiempo, más que motivado por una vocación fue una obsesión. Hace cincuenta años, cuando estaba en la escuela, mi amigo me pidió que lo ayudara en su venganza, le ayudé en lo que pude para que acabara un poco más rápido, cuando estábamos junto a la choza del conserje, uno de los chicos nos vio y después llegaron más, Frank estaba adentro del agujero, y vi a los tipos llegar, ni siquiera pude hablar, Salí corriendo, cuando llegué a la biblioteca lo escuché. En ese momento Jon se vio así mismo caminando a prisa hacia la escuela.
-Dediqué toda mi existencia a intentar regresar para salvarlos, es por eso que inventé el remo.- Agregó la voz. Jon vio como la butaca y la carpeta se desvanecía en un pequeño tornado.
-Presiona el rojo.- Dijo la voz, Jon lo hiso, en ese momento sintió como todo giraba y su cuerpo era jalado hacia todos lados, después que se detuvo, levantó el gorro y vio  a un viejo de lentes parado frente a él, ambos estaban rodeados de vórtices del que proyectaban imágenes, como cámaras de seguridad que flotaban en el vacío.
-Este es el modo en el que te contacté, lo que vez de mi es una proyección del futuro, adentro de los vórtices esta lo que has vivido.- Jon se acercó a uno y vio cuando estaban a punto de golpear a Frank, se miró cuando patearon a Frank en la mano
 - Mira al piso, tómala y ayúdalo.-  se susurró así mismo, luego vio como corría.
 –Así pude comunicarme con tigo.- Exclamó el hombre. Y el aparato como lo mandaste al pasado, el viejo sacó una carpeta. –Tómala, cuando vuelvas a presionar el rojo saldrás con ella. –pero en qué momento presioné le rojo la primera vez?- Pregunto Jon.
 –No es la primera vez que me hablo a mí mismo en el portal. Ahora sería muy confuso para ti que lo entendieras.- Jon presiono el rojo.


-Necesito entrar a la escuela, y ya sé de donde sacare la identificación.- Dijo Jon y dio la vuelta violentamente a la esquina, mirando hacia abajo, cuando sintió que alguien pasaba a su lado, lo tomo del hombro, lo golpeó en el abdomen, le metió la mano en los bolsillos, quitándole la credencial y dejándole el remo, para después salir corriendo.
-Tal vez exageré perdiendo el control de esa manera.- rió Jon, se dirigió a la escuela rápido para anticiparse a sí mismo. Pasó al guardia. Caminó por la parte de las canchas mientras veía la carpeta, que había guardado en la bolsa de canguro, era el mismo recorte de periódico, pero el instructivo era una hoja más grande, abajo tenía una línea que decía ”presiones (Símbolo) para entrar a rio”, además la palabra que había encontrado tachada era “remo”.
-Si hubiera sabido esto antes, no hubiera hecho…- dijo Jon, luego arranco la línea de hasta abajo, y tacho la palabra remo.

-Es hora de mi siguiente movimiento.- Sacó su celular y marcoó el número de la escuela. –Buen día, Instituto de bachillerato numero 3713.- Respondió una mujer. –Necesito evacuar.- dijo Jon. -¿Cómo?- Pregunto la mujer al teléfono. –Si, necesito evacuar, llevo días estreñido.-  Expreso Jon. –Lo siento no puedo ayudarte.- dijo la mujer y colgó. Jon volvió a marcar el número. . –Buen día, Instituto de bachillerato número 3713. Respondió la misma mujer.- Rápido tiene que sacar a todos de ahí, corren peligro. – Exclamo Jon. – ¿Qué pasa? ¿Porque?- Esto va a explotar en cualquier momento.- Dijo Jon, luego puso su celular en su trasero y expulsó una flatulencia. –Es letal hasta para mí. –Agrego Jon. Solo escuchó el tono de numero ocupado.

Al pasar por el edificio de administración dos, vio un letrero, que anunciaba la semana de la comida saludable, algo que se realizaría hoy en la cafetería, al parecer regalarían comida, por lo que estaría lleno. -Eso explica porque fui el único en regresar al salón.- Luego de decir eso se dirigió al salón y dejó la carpeta sobre su butaca.
Salió de su salón y se dirigió a los baños, alebrije iba hacia la madriguera, Jon se subió el gorro, entro rápido por la puerta y golpeo al otro tipo, vio como el perro jalo de los pies a el mismo, entonces lo pateo en el pecho haciendo que este le quitara los tenis, para que después se saliera de ahí, cuando salió, Jon se bajó el gorro.
-Pero, ¡¿Qué mierda?! ¿Cuántos son?- Preguntó el perro asustado.
-Solo uno, ahora pásame el tenis por favor.- dijo Jon sonriendo, el perro obedeció, y se los llevó, a pesar que estaba sofocado.
-Buen chico, espero que te portes bien. – dijo Jon, y se puso el calzado y salió del baño. se dirigió a la madriguera.
–Acompáñame al taller te enseñare un robot nuevo.-, –Tengo cosas que hacer antes.- , -¿A dónde vas?- pregunto Frank. –Atrás de ti-. Jon se vio a si mismo desaparecer en el tornado.
-¡Ñus locos!. – Exclamo Frank haciendo una cara de sorpresa por primera vez en su vida.
-Oye, esa es mi frase.- dijo Jon.
-¿Has corrido tanto que ahora te tele transportas?


(voy a poner un final más pro, ya lo subiré después )