-09:21 a.m. Bien ya estoy listo, en cinco minutos
apareceré aquí en la butaca, entonces me esconderé en la esquina.- Dijo Jon en
voz alta para establecer su plan. –No puedo creer que sea yo.- escucho Jon una
voz en su cabeza.
-Creo que me estoy volviendo loco.-Pensó Jon.
-¿No te has preguntado de donde salió el remo?- Pregunto esa
voz proveniente de la nada.
-¿Remo?- respondió Jon, que al hablar al vacío pensaba que
perdía la cabeza, se agachó en la esquina y bajó la cabeza.
-Eso nunca te hará invisible.- Comento la voz.
-¿Eres quien creo que eres?-pregunto Jon.- Soy una de las
mentes más brillantes de mi tiempo, más que motivado por una vocación fue una obsesión.
Hace cincuenta años, cuando estaba en la escuela, mi amigo me pidió que lo
ayudara en su venganza, le ayudé en lo que pude para que acabara un poco más
rápido, cuando estábamos junto a la choza del conserje, uno de los chicos nos
vio y después llegaron más, Frank estaba adentro del agujero, y vi a los tipos
llegar, ni siquiera pude hablar, Salí corriendo, cuando llegué a la biblioteca
lo escuché. En ese momento Jon se vio así mismo caminando a prisa hacia la
escuela.
-Dediqué toda mi existencia a intentar regresar para salvarlos,
es por eso que inventé el remo.- Agregó la voz. Jon vio como la butaca y la
carpeta se desvanecía en un pequeño tornado.
-Presiona el rojo.- Dijo la voz, Jon lo hiso, en ese momento
sintió como todo giraba y su cuerpo era jalado hacia todos lados, después que
se detuvo, levantó el gorro y vio a un
viejo de lentes parado frente a él, ambos estaban rodeados de vórtices del que
proyectaban imágenes, como cámaras de seguridad que flotaban en el vacío.
-Este es el modo en el que te contacté, lo que vez de mi es
una proyección del futuro, adentro de los vórtices esta lo que has vivido.- Jon
se acercó a uno y vio cuando estaban a punto de golpear a Frank, se miró cuando
patearon a Frank en la mano
- Mira al piso, tómala
y ayúdalo.- se susurró así mismo, luego
vio como corría.
–Así pude comunicarme
con tigo.- Exclamó el hombre. Y el aparato como lo mandaste al pasado, el viejo
sacó una carpeta. –Tómala, cuando vuelvas a presionar el rojo saldrás con ella.
–pero en qué momento presioné le rojo la primera vez?- Pregunto Jon.
–No es la primera vez
que me hablo a mí mismo en el portal. Ahora sería muy confuso para ti que lo
entendieras.- Jon presiono el rojo.
-Necesito entrar a la escuela, y ya sé de donde sacare la identificación.-
Dijo Jon y dio la vuelta violentamente a la esquina, mirando hacia abajo,
cuando sintió que alguien pasaba a su lado, lo tomo del hombro, lo golpeó en el
abdomen, le metió la mano en los bolsillos, quitándole la credencial y
dejándole el remo, para después salir corriendo.
-Tal vez exageré perdiendo el control de esa manera.- rió Jon,
se dirigió a la escuela rápido para anticiparse a sí mismo. Pasó al guardia.
Caminó por la parte de las canchas mientras veía la carpeta, que había guardado
en la bolsa de canguro, era el mismo recorte de periódico, pero el instructivo
era una hoja más grande, abajo tenía una línea que decía ”presiones (Símbolo)
para entrar a rio”, además la palabra que había encontrado tachada era “remo”.
-Si hubiera sabido esto antes, no hubiera hecho…- dijo Jon,
luego arranco la línea de hasta abajo, y tacho la palabra remo.
-Es hora de mi siguiente movimiento.- Sacó su celular y marcoó el número de la escuela. –Buen día, Instituto de bachillerato numero 3713.- Respondió una mujer. –Necesito evacuar.- dijo Jon. -¿Cómo?- Pregunto la mujer al teléfono. –Si, necesito evacuar, llevo días estreñido.- Expreso Jon. –Lo siento no puedo ayudarte.- dijo la mujer y colgó. Jon volvió a marcar el número. . –Buen día, Instituto de bachillerato número 3713. Respondió la misma mujer.- Rápido tiene que sacar a todos de ahí, corren peligro. – Exclamo Jon. – ¿Qué pasa? ¿Porque?- Esto va a explotar en cualquier momento.- Dijo Jon, luego puso su celular en su trasero y expulsó una flatulencia. –Es letal hasta para mí. –Agrego Jon. Solo escuchó el tono de numero ocupado.
Al pasar por el edificio de administración dos, vio un letrero,
que anunciaba la semana de la comida saludable, algo que se realizaría hoy en
la cafetería, al parecer regalarían comida, por lo que estaría lleno. -Eso
explica porque fui el único en regresar al salón.- Luego de decir eso se
dirigió al salón y dejó la carpeta sobre su butaca.
Salió de su salón y se dirigió a los baños, alebrije iba
hacia la madriguera, Jon se subió el gorro, entro rápido por la puerta y golpeo
al otro tipo, vio como el perro jalo de los pies a el mismo, entonces lo pateo
en el pecho haciendo que este le quitara los tenis, para que después se saliera
de ahí, cuando salió, Jon se bajó el gorro.
-Pero, ¡¿Qué mierda?! ¿Cuántos son?- Preguntó el perro
asustado.
-Solo uno, ahora pásame el tenis por favor.- dijo Jon
sonriendo, el perro obedeció, y se los llevó, a pesar que estaba sofocado.
-Buen chico, espero que te portes bien. – dijo Jon, y se puso
el calzado y salió del baño. se dirigió a la madriguera.
–Acompáñame al taller te enseñare un robot nuevo.-, –Tengo
cosas que hacer antes.- , -¿A dónde vas?- pregunto Frank. –Atrás de ti-. Jon se
vio a si mismo desaparecer en el tornado.
-¡Ñus locos!. – Exclamo Frank haciendo una cara de sorpresa
por primera vez en su vida.
-Oye, esa es mi frase.- dijo Jon.
-¿Has corrido tanto que ahora te tele transportas?